Junio intenso, entre buenas noticias y hojas caídas

Junio intenso. Llegó con el equipaje cargado de noticias y de vacunas. Los deformadores de la verdad sacaron, otra vez, boleto en primera fila. Las batallas verbales siguieron cumpliendo sus rutinas, la necesidad de “tener razón” de algunos festejó otro aniversario de la sinrazón.

Junio intenso, con hojas caídas en el pentagrama de una sinfonía en pandemia.

Junio otoñal. Llegó el componente 1 para fabricar la vacuna Sputnik V en la tierra argenta. Un logro que habla de los fuertes lazos construidos con el instituto Gamaleya y el gobierno de Vladimir Putin.

Podrán decir, podrán hablar. Lo que se hará en este sur, que también existe, es sumamente complejo, requiere una alta capacitación en tecnología y recursos humanos.

Argentina es uno de los ocho países que fabrican vacunas en el mundo, debería ser motivo de orgullo para la sociedad y para todo el arco político. Pero, los “contra” respetan a rajatabla su libreto y con cara circunspecta dicen “no va a andar”, agitando las pancartas de su propia patología.

Junio intenso. Delirios dando vueltas en la calesita de las ambiciones desmedidas. Mentiras arrojadas al aire para atrapar una sortija que se rompe fácilmente al calor de la realidad.

Junio intenso. El Congreso estuvo muy activo. Basta de inventos, dijo el presidente de la Cámara baja y convocó a los representantes de los laboratorios para “aclarar” la oscuridad de las mentes de ciertos legisladores más interesados en el año electoral que en la salud de la población.

“Pfizer no exige ningún cambio en la ley argentina, sino que propone condiciones contractuales. Hay dos aspectos importantes donde la Ley no es compatible con las condiciones contractuales propuestas, pero la mesa de negociación está evaluando las cuestiones legales y técnicas para poder avanzar”, expresó ante los diputados el representante de dicho laboratorio Nicolás Vaquer.

“No hubo ningún pedido de pago indebido o exigencias por intermediarios de ningún tipo en ningún momento de las negociaciones con la Argentina”, reiteró derribando las acusaciones que hizo Patricia Bullrich, experta en el arte de la confrontación.

La titular del PRO teje, diariamente, su tela para llegar a una banca en el territorio del jefe porteño. Los duros y los moderadores, cada cual atiende su juego.

Disputas de poca monta frente a las necesidades de la población.

Las vacunas son indispensables. No solo para la salud, sino para la recuperación de la economía tan deteriorada por los males que venimos padeciendo.

El proceso de vacunación contra el COVID-19 avanza a buen ritmo. En Córdoba más de un millón de personas recibieron la primera dosis, en Villa María estamos cerca de los 30 mil habitantes inoculados.

Las proyecciones indican, de no mediar ninguna sorpresa, que en agosto el panorama tomaría nuevo color y se motorizaría la rueda de la economía.

Es difícil la espera, sí. Son necesarias nuevas medidas de apoyo a los sectores afectados por la pandemia, sí.

¿Se están preparando más anuncios? Sí.

Las zonas frías

Junio intenso. La semana pasada en Diputados se aprobó el proyecto para la reducción de la tarifa de gas (entre un 30% y 50%) en las zonas del país consideradas “frías”.

Nuestra provincia y el Departamento General San Martín están incluidos en el proyecto de tarifas subsidiadas. Un pequeño alivio para los hogares.

La propuesta que pasó al Senado tuvo 190 votos a favor, 16 en contra y 43 abstenciones. Hubo 16 legisladores que rechazaron la norma y 43 que se lavaron las manos en un tema tan importante para “la gente” que tanto nombran y dicen defender.

Sartre escribió que “somos lo que hicimos de lo que hicieron con nosotros”. Frente a lo que está sucediendo, uno se pregunta ¿Qué hicieron con nosotros?

Buscando en los vericuetos de la memoria nos encontramos con un acontecimiento de la historia que fue recordado por dirigentes del Frente de Todos.

Junio de 1974

El 12 de junio de 1974 el entonces presidente Juan Domingo Perón dio su último discurso en Plaza de Mayo. Los historiadores afirman que estaba molesto porque no se cumplían los acuerdos del Pacto Social promovido por su ministro José Ber Gelbard.

Los puntos centrales del acuerdo, firmado por sindicatos y empresarios, fueron:  congelamiento de los precios, suba de sueldos y suspensión de la negociación colectiva sobre el salario durante dos años.

En primera instancia, el Gobierno logró bajar considerablemente la inflación y disminuir la tasa de desempleo. A mediados de 1974 comenzaron las dificultades y el incumplimiento de algunos sectores empresariales, nada nuevo bajo el sol del país.

Frente a esta situación, los trabajadores salieron en apoyo de su líder y se concentraron en la mencionada plaza.

La última vez que Perón escuchó “la maravillosa música que es la voz del pueblo”.

“Estamos luchando por superar lo que nos han dejado en la República y, en esta lucha, no debe faltar un solo argentino que tenga el corazón bien templado.

Sabemos que tenemos enemigos que han comenzado a mostrar sus uñas. Pero también sabemos que tenemos a nuestro lado al pueblo, y cuando este se decide a la lucha, suele ser invencible.

El Gobierno del pueblo es manso y es tolerante, pero nuestros enemigos deben saber que tampoco somos tontos.

Mientras nosotros no descansamos para cumplir la misión que tenemos y responder a esa responsabilidad que el pueblo ha puesto sobre nuestros hombros, hay muchos que pretenden manejarnos con el engaño y con la violencia. Nosotros, frente al engaño y frente a la violencia, impondremos la verdad, que vale mucho más que eso”, señaló Perón en su oratoria.

Palabras que 47 años después, siguen vigentes. Muchos continúan apelando al engaño y a la violencia verbal (en este momento) para que el Gobierno no pueda concretar las acciones que ha planificado.

Medio siglo pasó y la búsqueda de un verdadero acuerdo, con madurez, es una utopía.

Equidad en los medios

Junio intenso. El Congreso votó la ley para promover la paridad de género desde una perspectiva de diversidad sexual, en los servicios de radiodifusión sonora y televisada del Estado nacional, cualquiera sea la plataforma utilizada.

¿Tuvo apoyo total? No.

Fue aprobada con 134 votos afirmativos aportados por el Frente de Todos, y los interbloques Federal, y de Unidad Federal para el Desarrollo. La mayoría de los representantes de Juntos por el Cambio se levantó de la banca a la hora de votar. Quedaron nueve y su voto fue negativo. Cosas que ocurren en el país del “no va a andar”.

“En Argentina, una investigación publicada en 2018 por Comunicación para la Igualdad muestra que el 64% de las personas que estudian comunicación son mujeres. Pero a la hora de llegar a trabajar en los medios los números se invierten: son apenas el 30% en las empresas periodísticas” (fuente: elciudadanoweb.com).

Una buena noticia para las trabajadoras de la comunicación. No tan buena, parece, para los que sirven a intereses alejados de las necesidades de los que prometieron representar.

Junio intenso, cargado de vacunas y antivacunas.

Mi nota del Suplemento Mano a mano de El diario del centro del país, con ilustración de Raúl Olcelli